Cuando la comida no tiene la culpa
El sobrepeso y la obesidad son condiciones complejas que van más allá de la simple ingesta de alimentos. Aunque factores como la genética y el estilo de vida juegan un papel importante, existen diversas causas psicológicas que pueden influir profundamente en la tendencia a ganar peso. Desde el estrés crónico hasta la baja autoestima, estos factores pueden desencadenar comportamientos alimentarios poco saludables y perpetuar un ciclo difícil de romper.
Tabla de contenidos
A continuación, exploraremos las 10 causas psicológicas más comunes que pueden estar detrás del sobrepeso y la obesidad. Cómo entenderlas puede ser clave para abordarlas de manera efectiva.
1. Imagen corporal distorsionada
Es la representación que se tiene del tamaño, contornos y forma del cuerpo y el sentimiento que ocasiona en las personas. Está íntimamente ligada a la autoimagen, a la autoestima y al sentimiento de identidad.
2. Descontrol alimentario
Ingerir grandes cantidades de comida, generalmente en menos de dos horas, con una sensación de pérdida de control sobre qué se come y cuánto se come, seguido por sentimientos de culpa y por una sensación de enojo, desesperación o decepción por no poderse controlar.
3. Insatisfacciones sexuales que se pagan comiendo
El sexo puede deparar altos niveles de placer, sin embargo, cuando es un deseo frustrado puede ocasionar mucha insatisfacción la cual se compensa con la comida.
4. Miedo a relaciones sexuales que se dificultan engordando
El miedo a entrar en una relación afectivo sexual puede provocar que a nivel inconsciente algunas personas se permitan engordar o no sean eficaces en sus intentos por adelgazar, para de esta manera, ser menos atractivas y dificultar la relación sexual que tanto temen, incluso aunque la deseen.
5. Ansiedad
Es el conjunto de reacciones físicas y psicológicas que ocurren ante la presencia de un peligro. El comer supone un gasto de energía y al implicar una forma de desgarrar y triturar, actividad un tanto agresiva, se transforma en una forma de reducir la ansiedad, forma rápida y pasajera, pero al alcance del paciente.
6. Manifestaciones depresivas
Algunas personas con insomnio, cansancio, dolores musculares y bajo nivel de autoestima, pueden presentar también obesidad.
7. Aparición de la obesidad como respuesta a la pérdida de un ser querido o tras una ruptura amorosa
Es muy probable que la persona recurra a la comida como vía de escape. En estos casos es muy difícil darse cuenta uno mismo, y en caso de que lo digan terceras personas, suele tomarse como un ataque, por lo que es una situación con la que es muy complicado lidiar.
8. Valor simbólico de los alimentos
Algunas veces solemos darle mayor significado a los alimentos por los recuerdos que nos evocan que por sus propiedades, es entonces cuando corremos el riesgo de comer de más para sentirnos queridos.
9. La obesidad como forma de evitar situaciones deseables
Funciona como un escudo de protección y justificación, no tengo pareja porque estoy gordita, no consigo el trabajo que quiero por mi sobrepeso y más pretextos que nos vamos creando, generalmente es miedo a la vida social, a mantener relaciones sexuales, a entrar en una nueva etapa de desarrollo, a la intimidad psicológica y afectiva de la vida en pareja, a perder la preferencia de la madre o el padre conseguida, gracias a limitarse la vida y estar pendiente de irse a la infidelidad.
10. La obesidad como forma de castigo
El concepto de culpa y el de castigo van unidos en nuestra cultura, el castigo nos permite pagar aquello que hemos hecho mal y este pago nos deja libres del sentimiento de culpa, muchas veces somos nosotros mismos quienes nos castigamos al obligarnos a tener sobrepeso.